Al finalizar la autoconvocatoria del año
2012, la primer paritaria, con el Acta Acuerdo ratificada por Decreto nº
1450/12, quedó pactado en uno de sus ítems la creación de una Comisión de Control y Monitoreo
Permanente de la reforma del Sistema de Seguridad Pública sobre el Sub sistema
de Policiamiento de la Policía de la Provincia de Santa Cruz la que, entre otros, debía estar
integrada por 5 representantes titulares y 5 suplentes de los trabajadores
dependientes de la Policía de la provincia en representación de la mesa de
diálogo.-
De esta forma la mesa de diálogo, de la medida de fuerza, buscaba protagonizar su propia garantía
al pacto cerrado con el Poder Ejecutivo, a sabiendas que la Jefatura de Policía
esperaba denostar y castigar a los "cabecillas", como así borrar todo
indicio que le incomode. Pues, fue así que ocurrió anteriormente en
nuestra provincia, con los acostumbrados mecanismos encubiertos de castigo de
"buena usanza" por parte de las cúpulas policiales.-
Integrar la Comisión de Control y
Monitoreo con trabajadores policiales fue la solución más viable a esta
incertidumbre que no apaciguaba el Decreto firmado por la máxima autoridad en
la provincia. Sabido es que existe el autogobierno policial que permite los oscuros antecedentes de disciplinamiento de la
Jefatura de Policía, institución sistemáticamente cerrada y que rinde culto o
decoro a la uniformidad del todo policial.-
Más aun, esta autoconvocatoria había trasvasado
las antiguas costumbres de los acuartelamientos policiales liderados por la
misma cúpula, que servían para poner o sacar a algún jefe, quien era el que en
definitiva moderaba la coexistencia con cambios tolerables a la continuidad del
"statu quo". Concretamente, se habían conquistado Derechos que el régimen
no estaba dispuesto a respetar.-
Transcurrieron más de diez días desde la
finalización de la medida de fuerza, el 22 de julio de 2012, y el Poder Ejecutivo
no emitía el documento para la afectación de los trabajadores propuesto para
integrar la misma. Sumado a las persecuciones de algunos jefes que querían justicia administrativa por mano propia, al haberse trabado las
sanciones disciplinarias por el Acta Acuerdo; y otros jefes que tenían
intenciones de realizar denuncias para detener los efectos del Decreto, eso sí,
anular los Derechos pero no el aumento de sueldo que también recibieron.-
Estas presiones revivieron el enardecimiento en
toda la provincia y los delegados por localidad se dan cita, una vez más, en
la ciudad capital para dar cuenta de lo que estaba pasando en cada localidad,
caso por caso. Se emitió un nuevo petitorio para cumplimiento del Acta Acuerdo;
al día siguiente se entregó el mismo a la Ministro de Gobierno Paola KNOOP en el
despacho del Secretario de Trabajo de la Provincia (Santibañez), anoticiando la
ministra que había emitido el escrito a la Jefatura para el cumplimiento de
esta parte del acuerdo.-
La afectación de los miembros ocurrió el
21 de agosto de 2012, con el primer
instrumento ministerial emitido, la Resolución nº 233/12. De esta forma se
inició la labor inorgánica, por fuera de la estructura policial, y dependiendo
directamente del Ministerio de Gobierno, para la vigía y prosecución del pacto
con el actor gubernamental.-
Mantener la llama del cambio era función
de la Comisión de Control y Monitoreo, junto a la entidad jurídica de la
Asociación Civil Policial, ambas promovidas con fuerza desde las bases que son
las que más sufren la perversidad del sistema actual.-
Así fue que, pos autoconvocatoria, esta
Comisión captó y dio soluciones a los distintos conflictos internos en toda la
provincia, la mayoría causados por una personalización del Jefe en contra del
conflicto Policial y, despues, por distintas clases de abusos que antes estaban al abrigo de la ponderada cadena de mando. También se gestionaron distintos proyectos para la
concreción íntegra del Decreto y solicitudes para mejorar el ambiente laboral.-
De esta forma se mantuvo el poder
conquistado desde abajo. Y por más que algunos jerárquicos intrascendentes
soñaran con la disolución de la Asociación Civil Policial (PJ 1162), entidad
fundacional del movimiento, y la Comisión de Control y Monitoreo, estas
siguieron juntas por dos años hasta que la Comisión vio realizado su esfuerzo con
la creación del Consejo del Salario Policial, el 27 de marzo de 2014, motivando representantes electos de un Órgano de Representación que es acompañado por la Asociación, hasta que
algún día veamos coronado el éxito con la fundación de un GREMIO
POLICIAL, hoy vedado por el Poder Ejecutivo Nacional.-
Los integrantes de la Comisión de Control
y Monitoreo tenían su asentamiento en distintas partes de la provincia de Santa
Cruz (localidades: Río Gallegos, Caleta Olivia, Puerto San Julián), provenían
de los cuadros del Personal Subalterno (jerarquías: Agente, Cabo, Sargento,
etc.) y del Personal Superior (jerarquías: Oficial Inspector, Oficial Principal
y Sub-Comisario), desempeñaban funciones en Comisarías, Bomberos y Unidades
Especiales, y habían participado activamente durante la medida.-
Los mismos se fueron renovando durante
este tiempo y pasaron por distintas situaciones, gratas e ingratas, que hacen a
la defensa de los derechos y a la construcción de una nueva identidad como
trabajadores policiales.-
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